El Rotary Club de Puerto Natales mantiene un banco de sillas de ruedas, el que desde su creación ha sido de gran importancia para la comunidad, al mejorar la calidad de de vida de sus usuarios y de la familia del mismo. La sillas se entregan en comodato mientras sea necesario para determinada persona, pero también hay otras que han sido donadas, a usuarios permanentes. Del mismo modo han sido favorecidas instituciones de salud o lugares de atracción turística, estos últimos para hacerlos más inclusivos para sus visitantes. De este modo, el banco de sillas tiene un flujo constante, donde en este momento juega un rol fundamental el socio Francisco Álvarez, quien con gran esmero lleva el control de las sillas, como también se preocupa de repararlas cuando alguna tiene fallas.
Hace pocos días por ejemplo, se cambió la silla de ruedas que estaba entregada a CONAF en el monumento natural «Cueva del Milodón», la que tenía algunas deficiencias. Esta ayuda técnica es de gran utilidad para que las personas de la tercera edad o con limitaciones de movimiento, puedan acceder a este lugar turístico tan atractivo.