El jueves 22 de septiembre, el Rotary Club de Puerto Natales, rindió un homenaje al Ejército de Chile, por haberse celebrado el 21 el Día de las Glorias del Ejército. Lo hizo en su reunión habitual, realizada en forma presencial en la sede rotaria, pero dirigida por su presidente Christian Gudenschwager desde la ciudad de Temuco, lugar de su residencia habitual.
Asistieron en representación del Ejército el comandante de la guarnición militar de Puerto Natales y Comandante del Destacamento Acorazado N.° 5 «Lanceros» coronel Carlos Osses Seguel, acompañado del subteniente Guillermo Donaire Guerraty y el suboficial mayor Jorge Maulén Tudela.
Actuó como maestro de ceremonias el socio Francisco Álvarez y representó al presidente en forma presencial el past presidente Carlos Fuentes Oyarzún. El brindis oficial lo hizo el socio Juan Carlos Mancilla, el socio Nelson Zúñiga leyó el objetivo de Rotary y el socio José Cuevas enumeró las efemérides a destacar.
La palabra oficial del club en homenaje al Ejército estuvo a cargo del presidente de Rotaract socio Gonzalo Valdés Lufi. Posteriormente se ofreció la palabra al coronel Osses, quien agradeció el homenaje de los rotarios natalinos y obsequió al club una medalla institucional.
Para terminar la ceremonia, se entonaron los himnos del Ejército y Rotario, coreados por todos los presentes.
Una sencilla pero solemne y muy merecida ceremonia, en reconocimiento al Ejército de Chile, siempre vencedor y jamás vencido.
Discurso de homenaje, autor Gonzalo Valdés:
«El destino ha unido de forma mágica las fechas de la Primera Junta de Gobierno, las Glorias del Ejército, la toma de posesión del Estrecho de Magallanes, y el aniversario del Destacamento Acorazado Nº5 “Lanceros”, diferentes hitos que convergen en el mes de septiembre: el mes de la Patria y del Ejército, creando así, una instancia especial para cada uno de los habitantes de esta tierra austral, que junto con el inicio de la primavera, construye una triangulación con el nacimiento de nuestra nación, el nacimiento de nuestra región de Magallanes, y el comienzo del estrecho vínculo de la comuna de Natales con el Ejército de Chile.
Para mí, en forma muy personal el estar el día de hoy leyendo estas palabras representan un alto honor y distinción, ya que como chileno, padre de una familia magallánica, Presidente de Rotaract y Oficial de reserva, me da la oportunidad de destacar a la institución de la Defensa que ha asegurado el territorio de conquista en esta gélida tierra austral, y que en un gran porcentaje es gracias a nuestro Ejército, para que podamos las actuales familias disfrutar la seguridad, progreso y desarrollo en esta prístina Provincia de Última Esperanza.
El Ejército de Chile, es una organización de personas que, a lo largo de los años, ha sido actor relevante en cada proceso histórico que como nación hemos debido enfrentar. No existe momento en el que el Ejército no esté presente y la colonización de nuestra región de Magallanes, no es la excepción a la regla.
En forma breve, puedo destacar que, desde la colonia, el Ejército fue forjando su identidad propia y diferenciadora del resto de las unidades militares de la corona. Alonso de Ribera aumentó la capacidad profesional y combativa de la tropa, estableció una digna escala de sueldos y llegó incluso a fundar industrias básicas para abastecer al personal militar. Este Ejército permanente del Reino de Chile, con el tiempo fue objeto de constantes mejoras, luego de la dictación de ordenanzas y reformas de acuerdo a las necesidades del país, sirviendo de base para la composición del Ejército creado más tarde para defender la independencia proclamada por la Primera Junta Nacional de Gobierno el 18 de septiembre 1810.
En este período resalta la figura de José Miguel Carrera, quien como gobernante de Chile, tuvo el mérito de haber sido el primero en impulsar la plena independencia de la Corona y ser el Primer Comandante en Jefe del Ejército. Este Ejército, tuvo triunfos y derrotas, pero sus integrantes lucharon con valentía en Yerbas Buenas, San Carlos, Concepción, Talcahuano, Chillán, El Roble, Membrillar, Cancha Rayada y Rancagua, entre otras.
Luego del Cruce de Los Andes y las victorias de Chacabuco y Maipú, el General Bernardo O’Higgins asumió el mando como Director Supremo, organizó el gobierno y consolidó la Independencia de Chile, conduciendo de esta forma los destinos de la nueva República. Entre sus obras destacan la creación de la Academia Militar, que posibilitó impartir una doctrina militar, y de la Escuadra Nacional, llamada a cautelar la presencia de Chile en el Océano Pacífico. Continue Reading